Uno de los casos más curiosos de mi vida deportiva me sucedió cuando me llamaron de Chile para que reforzara al colo colo en un partido que iba a jugar contra independiente.En ese entonces el viaje por avión lo teníamos que hacer en conexión de Lima a Tacna, luego por tierra hasta Arica y de allí "pescar" el LAN hasta Santiago.Cuando llegué a Arica, luego de una brava travesía, no pude contactar con el emisario chileno. Muy temprano salí para el aeropuerto de Arica en un camioncito que gentilmente se ofreció a llevarme. Por supuesto que cuando llegué, vi al avión que ya despegaba.¡Uyyy, su diablo! dije...cómo hago ahora, si el partido se juega hoy mismo a las tres de la tarde. Cuando en eso, se me acerca un señor muy distinguido y se presenta como el emisario de colo colo.Al hombre se le ocurrió ir a la torre de control y le informaron que otro avión no pasaba por Arica hasta tres días después. Pero...que había un Lufthansa que venía de Colombia rumbo a Buenos Aires.El emisario chileno era un hombre muy bien relacionado. Inmediatamente movió sus contactos de alto nivel. Y cuando bajó me dijo "desde este momento usted es el embajador del Perú..." Yo me quedé de una pieza.A la media hora aterrizó el Lufthansa y en medio de grandes ceremonias subimos al avión. Imagínense casi toda la nave era para nosotros. Lo cierto es que llegamos a tiempo a Santiago y jugué contra Independiente.
Por Teodoro "Lolo" Fernández
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